Mal servicio
La mala distribución o diseño.
Un local mal organizado puede hacer que la experiencia de compra sea incómoda.
La falta de servicios básicos como baños limpios y áreas de descanso también es un gran no-no.
Y si no hay suficientes opciones de tiendas o las que hay no son atractivas, la gente puede
optar por ir a otro lado.
Un mal servicio puede hacer que un cliente no vuelva.
La falta de limpieza puede ser un gran problema.
Los clientes buscan un ambiente agradable y limpio.
Otro factor es la falta de mantenimiento en general: un local que parece descuidado no inspira confianza.
También, la música a un volumen inadecuado o la mala iluminación pueden afectar la experiencia del cliente.
Y los problemas de accesibilidad… Nadie quiere enfrentarse a escaleras interminables sin
alternativas accesibles o a puertas estrechas que dificultan la entrada.
